Ah, la gestión del tiempo para un Business Development Representative (BDR). Te pasas el día entre llamadas, correos, actualizando el CRM, y al final, te preguntas: “¿Qué he hecho hoy?”. Optimizar el tiempo no es solo hacer listas de tareas y esperar lo mejor. Si no quieres acabar con más reuniones sobre productividad que tiempo real para ser productivo, aquí te traigo un manual (irónico) sobre cómo organizar tu jornada de manera eficiente.
Primero, si tu idea de organización es abrir el correo y empezar a contestar como loco, tenemos un problema. Según Indeed, los BDR necesitan tener un plan claro desde el inicio del día. La clave aquí no es solo qué haces, sino cuándo lo haces. Divide tu jornada en bloques y no caigas en la trampa de empezar con las tareas fáciles. Esas siempre te comen más tiempo del que crees.
Un consejo básico es aplicar la regla 80/20: dedica el 20% de tu tiempo a las actividades que te van a dar el 80% de los resultados. Sí, lo sabemos, no suena tan divertido como marcar checklists, pero tu futuro yo te lo agradecerá.
Muchos BDRs cometen el error de pensar que la multitarea es sinónimo de productividad. Spoiler: no lo es. Como bien explica Gartner, hacer muchas cosas a la vez solo garantiza que ninguna se haga bien. Si de verdad quieres ser efectivo, aprende a priorizar. Tienes que ser brutal contigo mismo: ¿qué tareas son realmente esenciales para mover al prospecto a la siguiente fase del embudo?
Empieza por lo más crítico, como hacer las llamadas más importantes o contactar con los leads más calientes, y deja lo demás para cuando tengas menos energía.
Siempre está el jefe que te dice que “cuantas más llamadas, mejor”. Bueno, según los datos de UpLead, los SDRs deberían hacer entre 80 y 100 actividades por día, incluyendo llamadas y correos electrónicos. Pero cuidado, calidad antes que cantidad. Si haces 100 llamadas pero no logras conectar con los leads, has desperdiciado tu tiempo.
El truco es combinar cantidad con calidad. En lugar de ir a toda máquina, tómate el tiempo para investigar antes de hacer esa llamada o enviar ese correo. No se trata de hacer números, sino de cerrar ventas.
Si usas el CRM solo para actualizarlo al final del día, estás perdiendo una gran oportunidad para ahorrar tiempo. Según ActiveCampaign, mantener tu CRM actualizado en tiempo real no solo te hace más organizado, sino que también evita que tengas que buscar detalles en la pila de correos y notas que tienes por ahí.
Hazte el favor de automatizar lo máximo posible. Configura recordatorios, plantillas de correos, y cualquier herramienta que te permita hacer tu vida más fácil. El CRM está para servirte a ti, no al revés.
A veces pensamos que ser productivo es hacerlo todo nosotros mismos. Pero si te pasas el día haciendo tareas que podrían estar en manos de otros, estás frenando tu propia productividad. Como sugiere TaskDrive, aprende a delegar las tareas repetitivas o administrativas. Automatiza las que puedas, y si tienes un equipo, delega esas tareas que no requieren de tu atención directa.
Además, recuerda que no todo es urgente, aunque suene urgente en tu cabeza. Aprende a diferenciar lo urgente de lo importante.
La productividad no significa estar ocupado todo el tiempo. Si no paras, terminas colapsando. Tomar descansos cortos puede aumentar tu rendimiento. De acuerdo con Breakcold, los descansos estratégicos te permiten recargar energías y mejorar tu concentración. Utiliza la técnica Pomodoro, que sugiere trabajar 25 minutos y luego descansar 5. No, no necesitas estar sentado todo el día para ser productivo.
Las tareas que requieren mayor esfuerzo mental (como hacer esa llamada difícil) deben ser las primeras. Parfrey Murphy recomienda que organices tus actividades más complejas al inicio del día, cuando tu mente está más fresca. Deja lo más fácil o mecánico para cuando tu cerebro ya esté en modo “piloto automático” (sí, todos sabemos que llega un momento en que funcionas así).
Si tu respuesta a "¿cómo gestionas tu tiempo?" es “simplemente hago lo que toca”, estás en problemas. La automatización es tu mejor amiga. Configura correos automáticos, organiza plantillas para respuestas frecuentes y utiliza software que te ayude a reducir el tiempo que gastas en tareas repetitivas. SalesFuel insiste en que cuanto más automatices, más tiempo tendrás para dedicarte a lo realmente importante: hablar con los clientes.
En ventas, si no mejoras, te quedas atrás. El tiempo que inviertas en formación siempre será tiempo bien gastado. Aprender nuevas tácticas, investigar sobre tus prospectos o incluso mejorar tu uso de las herramientas puede hacer una gran diferencia. Según Gartner, los mejores BDRs dedican tiempo no solo a vender, sino a aprender cómo vender mejor. La formación continua es una inversión de tiempo que te ahorrará horas de frustración en el futuro.
El día está acabando, pero no te vayas a casa sin hacer una revisión rápida de lo que has conseguido y lo que te queda pendiente para el día siguiente. Según TaskDrive, esta pequeña revisión diaria es clave para empezar el siguiente día con un plan claro. Así no perderás tiempo por la mañana intentando recordar en qué estabas.
Y sí, después de revisar, tómate un respiro. No hay nada peor que empezar el día sintiéndote como si nunca hubieras terminado el anterior.
Optimizar la gestión del tiempo como BDR no es cuestión de trabajar más, sino de trabajar mejor. Desde priorizar las tareas clave hasta aprovechar las herramientas de automatización y tomar descansos estratégicos, la productividad no es algo que suceda por accidente. Planifica tu día, delega lo que puedas y no te castigues por no poder hacerlo todo. Porque, al final del día, se trata de vender más en menos tiempo, no de quedarte pegado a la silla hasta que las luces de la oficina se apaguen.